Muchas de las razones para insistir en los calentadores unitarios Armstrong son las que nunca se ven. Los componentes como motores, cojinetes, tubos, revestimientos y aletas son muy resistentes para garantizar un rendimiento duradero.

Las opciones de Armstrong para el material, el punto, la altura y el tipo de aleta, por ejemplo, ayudan a explicar por qué nuestros núcleos de calentamiento duran mucho más y son más productivos que las unidades de la competencia. Todos estos factores tienen un papel importante en la transferencia del calor. Para conseguir una solución rentable, hay que saber cómo se deben equilibrar estos y otros factores. Estos conocimientos son seguramente la parte más importante de las muchas ventajas escondidas de Armstrong.

Tipos de aletas

En la fabricación de calentadores unitarios se usan generalmente dos tipos de aletas. La aleta en forma de L tiene un pie como base y se devana a presión en el material de tubo fresado. La base en forma de L ofrece una área de contacto grande entre el tubo y la aleta, lo que garantiza una transferencia de calor efectiva y duradera. La aleta en L se recomienda cuando los tubos y las aletas son del mismo material. (Consulte el dibujo.)

La aleta keyfin se fabrica creando una ranura helicoidal en la superficie del tubo y enroscando la aleta en la ranura. El metal que se desplaza de la ranura se martilla entonces contra la aleta. Esto se traduce en un ajuste hermético entre la aleta y el tubo. La aleta keyfin es el mejor diseño para tubos y aletas de diferentes materiales. (Consulte el dibujo.)

Las unidades básicas se pueden usar en configuraciones de descarga horizontal o vertical de dos salidas. La adición o sustitución de una sección de rejilla de ventilación vertical de cuatro salidas produce un patrón de descarga cuadrado. Los núcleos están disponibles para vapor o líquido, lo que permite aplicar unidades en diferentes áreas de la planta en las que puede haber distintos medios de calentamiento.